Mantener los dispositivos limpios no solo mejora su apariencia, sino que contribuye al correcto funcionamiento de puertos, teclas y pantallas táctiles. Una limpieza adecuada evita la acumulación de polvo, grasa y gérmenes que pueden deteriorar sus componentes.
1. Apague y desconecte el dispositivo antes de limpiar:
Siempre debe asegurarse de que el equipo esté apagado y desconectado de cualquier fuente de energía antes de iniciar la limpieza, para evitar cortocircuitos o daños.
2. Utilice productos adecuados:
Use un paño suave de microfibra ligeramente humedecido con agua o con productos específicos para pantallas. Evite el uso de alcohol isopropílico puro, cloro, amoníaco u otros productos agresivos, especialmente en pantallas y superficies tratadas.
3. Atención especial a puertos y ranuras:
Para limpiar puertos USB, Lightning, o de carga, use aire comprimido o cepillos especiales con cerdas suaves. No introduzca objetos metálicos ni líquidos en estas zonas.
4. Limpieza del teclado y ventilaciones:
En portátiles, es común que el teclado acumule polvo y restos de suciedad. Puede utilizar aire comprimido y un pincel seco para eliminar residuos. Las ranuras de ventilación también deben mantenerse libres para evitar sobrecalentamientos.
5. Frecuencia recomendada:
Realizar una limpieza ligera semanal y una más profunda cada mes contribuirá a conservar el equipo en buen estado y evitar daños físicos.
Conclusión:
El mantenimiento exterior es tan importante como el interno. Siguiendo estas recomendaciones, sus dispositivos se verán mejor, funcionarán correctamente y tendrán una mayor vida útil.
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